Los brasileños llegaron como favoritos para ganar este juego y pasar a semifinales. Ya se veían claramente adentro que hasta con luces le hicieron ponerse la camiseta al Cristo del Pan de Azúcar. En cambio, Holanda llegaba con perfil bajo, no llamando tanto la atención como otras veces...y se llevo la victoria.
Brasil, al fin jugo como todos queríamos verlo jugar, vistoso. El primer tiempo de Brasil fue fantástico y le pego flor de paseo a los túlipanes que no sabían donde estaban parados. Robinho, fue el autor del único gol de ese primer tiempo. Robinho, el jugador más cagón y pecho frío del Mundo, junto con el "Pendejo" Torres.
En el segundo tiempo la historia cambio, por más que Brasil siguió contando con chances. Un centro que era completamente del arquero Julio César, fue interceptado y peinado por Felipe Melo quien anoto el empate en propia meta. Más tarde tras un tiro de esquina, entre Lucio, Juan, Felipe Melo y todos esos jugadores que si los unís haces la Torre de Babel, cabeceó Sneijder que mide 1, 70 metros.
Al final, El brasileño lloró.
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